17 Oct De bombero a caminante
Es cierto que muchas veces los pacientes llegan a la consulta odontológica motivados por un dolor en sus bocas comparable a un incendio descontrolado.
Es cierto que a mí, como a muchos, me gusta vivir momentos llenos de adrenalina.
Pero, si de odontología hablamos, me resulta más adulto y criterioso aprovechar esa luz amarilla ocasional para revisar el comportamiento que nos llevó a esa crisis.
Los tratamientos racionalizados con objetivos planteados a priori son, sin duda, más constructivos y duraderos. Permiten un crecimiento real del paciente.
El paradigma actual nos obliga a cambiar de conducta a todos los actores de esta obra. Los pacientes deberán comprometerse a hacer un cambio de actitud y los profesionales a educarlos y acompañarlos, mostrándoles las virtudes del mismo.
Afortunadamente muchos de nuestros pacientes comparten esta filosofía y concurren a las consultas voluntariamente (?), encarando este tipo de tratamientos a modo de un camino que los lleve a una rehabilitación futura.
No es necesario hacer grandes proezas, sólo un objetivo, un compañero de viaje, perseverancia y convicción.
¿Qué opinan? ¿En qué grupo desean estar?
Mariano (@drmorgante)
Mariano
Posted at 14:07h, 17 octubreBuen final de nota : No es necesario hacer grandes proezas, sólo un objetivo, un compañero de viaje, perseverancia y convicción….. Groso
Dr. Morgante
Posted at 14:13h, 17 octubreMuchas gracias Mariano.